¡Stejzy finalmente está en casa!

Nuestro objetivo no es solo quitar a los perros de sus dueños y ponerlos en adopción. Algunos de los perros dentro de los asentamientos tienen dueños que ni siquiera tienen idea de lo que es la castración o la vacunación. Pero, después de varias visitas, terminan entregando el perro para que al menos podamos tratarlo. ¡Stejzy tiene una familia amorosa, a su manera de mostrar amor! Estamos comprometidos a educar al público para garantizar que nuestro enfoque sea sostenible a largo plazo. Hace un mes, fuimos con la dueña a la clínica para la vacunación y ella recibió un microchip a nombre de la dueña. Luego fue operada para la esterilización y la eliminación de un crecimiento físico anormal, y cubrimos todos los gastos. Hoy se ha reunido con su familia después de una estancia de 15 días de preparación y recuperación postoperatoria. Su dueña, a pesar de enfrentar circunstancias difíciles, está comprometida a brindarle los mejores cuidados posibles. Esta misión no solo cambió su vida, sino que le dio vida. El tumor que la había estado agobiando también fue removido, y con él, el ciclo de reproducción interminable que agotaba su cuerpo año tras año. Para Stejzy, este es el comienzo de algo nuevo, una vida donde no tiene que luchar contra el incansable desgaste de dar a luz y recuperarse dos veces al año. Para nosotros, es el alivio de saber que miles de cachorros, que habrían nacido en un sistema ya más allá de sus límites, nunca tendrán que soportar vidas de lucha. Esto no es solo una victoria para un perro, es un triunfo silencioso para la compasión y el cuidado, un pequeño pero poderoso recordatorio de lo que el amor y la determinación pueden lograr. Ahora, Stejzy finalmente puede concentrarse en ser ella misma: feliz, saludable y amada.